Los humanos diferenciamos un puñado de cientos de colores, la mejor forma de identificarlos es a través de sus nombres, cada tono tiene un nombre, pero cómo sabemos cual nombre corresponde exactamente a un tono específico, por ejemplo para distinguir precisamente el lila, del malva, el violeta o el lavanda se utilizan sistemas de referencia como las tablas o esquemas de colores.
Estas tablas contienen información que facilitan la comunicación, la hacen precisa y estandarizada, y por eso precisamente son utilizadas entre los biólogos, para describir la coloración de los organismos. Fueron muy comunes entre los naturalistas, los expedicionarios y los viajeros y en la actualidad existen versiones digitales e interactivas.
Este es un tema que nos interesa y que tiene algunas implicaciones como las siguientes:
- Los distintos usos que se les dan
- Las versiones digitales que se han creado
- Las aplicaciones más creativas
- Las implicaciones más interesantes
- Los aparatos más innovadores
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